Este año el ganado no entró en la huerta, cientos de serapias campaban
por el verde prado, la tarde se presentaba con cielo limpio de poniente,
y como la querencia irremediablemente tira para el paisaje, la orquídea
quedó en un segundo plano como mera espectadora del trabajo de mi
acompañante 10mm que disfrutó de lo lindo de la estampa primaveral.
PN del Estrecho