El despertar del otoño,
con su cambio de estación
va dejando su huella,
derramando hojas y emoción.
El correr del arroyuelo,
suena en la mañana como un canto,
despertando del sueño,
a todo aquel soñador y casto.
Cuando a una casa te acercas,
escuchas el ladrido del perro,
este avisa a su dueño tu presencia,
y el mismo está ávido para su defensa.
El andante del camino se agota,
la ilusión de llegar se nota
mientras su cuerpo saca fuerzas de flaqueza,
para al final tener la recompensa.
Los árboles hablan entre ellos,
en su lenguaje mueven las hojas,
así se entienden en su idioma,
pero............. qué naturaleza más sabia.
Hojas que caen en el otoño,
manto que se forma en su entorno,
luego tienen su musica al pisar,
significa que el verano acaba de terminar.
El frio da a los dientes trinar,
es una sensación no para explicar,
solamente te hace temblar,
y hasta el pensamiento se puede anular.
Texto: Paco Perez
Agradecer al amigo Paco Perez, de querer formar parte de este sitio con sus magníficos textos, que en un futuro acompañaran algunas imágenes de este blog.